Golf de Disco

El objetivo de este original deporte es lograr introducir un disco volador en una canasta, en el menor número de intentos posible, a lo largo de un campo de golf.

El primer caso que se conoce de la práctica de algo similar a este deporte data de 1926, en Vancouver, un grupo de estudiantes jugaban con tapas de hojalata de estaño. En los treinta, cuarenta y cincuenta fue creciendo su popularidad hasta que en los sesenta la empresa Copar Plásticos de Chicago intentó crear el Sky Golf con un paquete de frisbees,pero fracasó.

En 1965, George Sappenfeld vio a unos chicos lanzando un disco y se le ocurrió que podrían jugar golf con éstos. Para 1968 se había convertido en Supervisor del Parque "Los Cien Robles", donde entró en contacto con el MFG Wham-O y les comentó su idea con el fin de que le ayudaran a celebrar un concurso de golf  de disco para sus programas de recreación, de manera que ellos enviaron frisbees y aros Hula (actual Polo Hole) como blancos. Al año siguiente, Ed Headrick, de Wham-O, celebró un evento con el golf de disco volador incluido en el programa, en los campos de Pasadena, cerca del Rose Bowl, no obstante esto fue lo último que se supo durante siete años.

Mientras tanto, un pequeño grupo de personas de Rochester, Nueva York, que nunca habían oído hablar del Manuel Goldy Norton de Frisbee que existía en aquella época, habían estado jugando al golf de disco de forma regular en torneos y ligas. Habían comenzado en agosto de 1970 y para 1972 se había promovido el Campeonato Anual de Disc Golf de Rochester.

En 1973, este grupo de discgolfistas decidió crear su reglamento para un torneo nacional y probar si había más gente interesada. A partir de este momento, la afición y práctica de este deporte comenzó a crecer rápidamente no sólo por entretenimiento sino porque además mejora mucho la postura, la meditación y concentración, sin riesgo de lesionarse. Va camino de convertirse en profesional como el golf.

Como comentaba anteriormente, este deporte se formalizó en la década del 70 y comparte con el golf el objetivo de completar cada hoyo en el menor número de golpes, aunque en este caso se trata del menor número de lanzamientos.

El disco de golf se lanza desde una zona determinada hasta una cesta de metal elevada llamada Polo Hole. A medida que se vaya lanzando, en caso de no acertar desde un comienzo, el deportista repetirá consecutivamente el tiro desde el punto en que el disco haya caído. Como sucede en el golf convencional, los árboles, los arbustos, y los terrenos cambiantes alrededor de las calles, forman los mejores y más diversos escenarios para un golfista. A pesar de que la función del disco de golf es igual a la tradicional pelota, es muy probable que no se requiera un green fee, no se precise de un cadi para recuperarlo, y gracias a su bajo costo económico, puedan usarlo quienes quieran y se animen a practicar el deporte.